miércoles, 21 de julio de 2010

Telón



Es el pozo orgánico de las almas,
el proceso mágico de las ratas,
el engaño truco
el cordón umbilical y el ojo hueco
el espejo cínico y la tórtola cruenta

la lengua piadosa,
la luz clarividente, el tú y el yo
la tercera persona del singular
a m e t r a l l a d a .

Se levanta el telón.


N. G. 2010

lunes, 12 de julio de 2010

HEMATÍES Y HORMONAS




Nico Grijalba de la Calle

La pieza escénica (sinónimo de performance libre, rica en nutrientes) UUUHHH!!! Yo fui un hombre lobo adolescente inventado horrores se presenta en Madrid, en La Casa Encendida, los próximos días 14 y 15 de julio. Al frente de esta cámara de los horrores, recubierta de mucho pelo, y con una danza histérica de objetos por todos los lados, Guillem Mont de Palol, junto con Jorge Dutor y Dr. Kurogo, ponen en marcha un juego sinestésico de terror. Estos tres chicos barbudos le dan la vuelta, como en un visionado hipnótico, al género del terror, promoviendo, muy acertadamente, que quizá lo más terrorífico, como ya aventuraban Freud y otros señores con levita, es en el fondo lo más familiar.

Hablo con ellos a pie de tumba, en el mismísimo Cementerio de la Almudena. La luna y el gritito histérico de un grillo nos acompañan. Asustémonos.


UUUHH…, ya el título parte de una interjección, algo jocosa. ¿Se trata de darle la vuelta al terror?

No lo podrías haber descrito mejor. Se trata exactamente de darle la vuelta a los clichés del género de terror, asociándolos con imágenes y objetos que andan muy lejos de esa atmósfera. De esta combinación surge un nuevo lenguaje digno de Frankenstein.


Me resultáis algo pitagóricos..., por eso de buscarle a las cosas su propio sonido. ¿Cómo es el trabajo de extraer el ritmo a los objetos que entran en escena?

Más bien confundimos esas cosas con sus sonidos. Todo dado la vuelta de nuevo, muy montaña rusa.

Tres palabras: Acción / movimiento / expresión. En los proyectos performáticos, ¿existe también tiempo para la reflexión?

En los proyectos performativos la parte teórica y de reflexión cada vez se hace más fuerte. Hay cierta necesidad de articular el trabajo, para entenderlo nosotros desde dentro y que lo entendáis vosotros desde fuera; al menos en nuestro caso. No se puede hablar por todos.

Jugáis con imágenes-símbolo, huellas icónicas del terror, ¿cómo van surgiendo las diferentes escenas de vuestra propuesta?

“Pues mira, quiero que te vayas al fondo, a la pared del fondo, y que te quites la camiseta. Entonces voy yo y te quitaré los zapatos. En la pared haré como una mancha de sangre, con pintura roja, y te voy a poner una especie de chinchetas falsas en los dedos de los pies, rollo tortura china”. …

Esta es la base del trabajo, el inventar escenas de terror. Al darles cuerpo, un espacio y un tiempo, con unos objetos concretos, aparecen escenas abstractas y otras que no lo son para nada.




Creo que hay un juego muy expresionista con las luces, las sombras, las texturas, los sonidos...

La primera versión que presentamos era muy teatro, muy de efecto y de usar todos los elementos teatrales posibles. En la nueva versión de la pieza hemos eliminado esta capa dejando lo materiales mas puros, mas limpios y mas de "concepto" o de "estudio",
menos teatral pero mas efectista, creemos.


¿Sois de terror grasiento y muy sangriento o sois de los del terror limpito y psicológico? Vamos, ¿casquería o telequinesis?

Bueno, no hay sangre en escena aunque sí aparece de repente en las retinas de los espectadores, o en los sesos…

Estamos sumidos en un desorden y un caos tremendo acompañados por muchísimos objetos, muchísimas imágenes y sonidos distintos, pero está todo muy estudiado y formalmente es impoluto. Así que diremos que "del terror limpito".

A ver, mis valientes, ¿qué es lo que de terror tiene la escena performance actual?

Hay mucho terror. Dan terror las instituciones, dan terror los programadores, dan terror las políticas culturales, da terror el criterio de la prensa... en general hay mucho terror, y mientras no aparezca una manada de zombies que cambie el paisaje cultural de media Europa no nos quitaremos de encima a todos estos que nos dan tanto miedo.

Aún así ya vamos siendo algunos zombies y nos vamos haciendo con algunas cloacas, pero muy poco a poco, y por danza se sigue entendiendo "baile moderno" y por artes escénicas "declamación".

¡Zombie Revolution ya!




Ahora que el colmillo se lleva mucho, ¿de dónde os sale esa debilidad por el hombre lobo, por ese hombre de pelo en pecho…?

Pues podríamos hablar del licantropismo como género hipnótico, podríamos hablar de Jekyll y Mr. Hyde como retrato de la sociedad actual, podríamos teorizar mogollón de cosas densísimas utilizando el género, pero nos quedamos con que nos mola taco el rollo pelo y el colmillamen.

Nos preguntábamos porqué la gente iba a ver pelis de terror y a cagarse viva de miedo en un cine o en un parque de atracciones, o a tirarse por un puente, esas cosas que hacemos los seres humanos desarrollados. Y vaya, lo que primero se nos ocurrió era relacionarlo con un tipo normal, que de repente se convierte en un monstruito buscando "algo de acción un tanto desmesurada".

Si tuvieseis que hacer un TOP CINCO de vuestros monstruos favoritos...

1. La Robot, una mujer gigante. www.laribot.com
2. Las Hermanas Medusillas. Maria y Cuqui Jerez.
3. Teatron. http://www.tea-tron.com
4. La puerta de atrás. http://laportabcn.com
5. Una panda de impresentables que dan bien de miedo. http://www.in-presentable.com/


¿Y alguna vez os han asustado con un UUUHHH?

Vamos de superhéroes…, pero en el fondo somos unos caguetas.




UUUHHH!!!, Yo fui un hombre lobo adolescente inventando horrores se podrá ver en LA CASA ENCENDIDA (Ronda de Valencia, 2) de Madrid, los días 14 y 15 de julio a las 22.00 horas. Precio: 3 euros.